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El 5 de diciembre se conmemora el Día internacional del Voluntariado, y desde FEAFES Galicia queremos destacar la labor de aquellas personas que dedican parte de su tiempo libre a realizar actividades con personas con problemas de salud mental.
Santiago Rodríguez y Aaron Carrascal comparten pasión y conocimientos sobre fútbol sala, y en el último año han colaborado como entrenadores del equipo futsal de FEAFES Vigo. Todas las semanas trabajan aspectos tácticos y técnicos de este deporte con los usuarios de la delegación viguesa, y una vez al mes acompañan a los jugadores a los partidos de la Liga de FEAFES Galicia.
«Para mí fue una realidad nueva; muchas veces vivimos de espaldas a muchas situaciones que tenemos cerca que no queremos o no nos atrevemos a descubrir», nos cuenta Santiago. «Al principio me daba algo de miedo porque no sabía qué tipo de personas me encontraría y si estaría capacitado para poder ayudarles, pero gracias a FEAFES Galicia y al trato de los jugadores resultó muy sencillo». Santiago asegura además que le gusta enseñar y que «siempre es gratificante aportar una pequeña ayuda para que otras personas aprendan y disfruten».  
Actualmente, Santiago y Aaron forman parte de la Academia de Porteros, una asociación impulsada junto a otros dos compañeros que ya ha mostrado su compromiso con FEAFES Galicia gracias a la implicación de estos dos miembros. En el equipo de FEAFES Vigo cuentan con el apoyo, también voluntario, de Ismael Solino, que reconoce que lo más gratificante de entrenar a este equipo es «el progreso en la recuperación de los jugadores a través del ejercicio y su integración social».
  
Al igual que ellos, pero a 200 km de distancia, Iván Pico nunca falta a su cita semanal con el equipo de FEAFES Lugo. «Utilizamos un deporte colectivo, como es el fútbol sala, para potenciar los valores del deporte y que después los chicos puedan transferirlos a sus vidas diarias» nos cuenta el entrenador del equipo lucense. «El fútbol sala ha ocupado mi vida profesional, y que eso pueda servir para ayudar a la gente es suficiente recompensa», añade.
Pero no todo el voluntariado de FEAFES Galicia se desarrolla en el ámbito del deporte. Jesús Cudeiro entró en contacto con la entidad al realizar las prácticas de la carrera de psicología en FEAFES Santiago, y desde entonces participa como voluntario en cursos formativos, campañas de sensibilización y jornadas de respiro familiar. 
De esta experiencia se queda ‘con las vidas de las personas’: «Cuando pasas un tiempo con ellos, te acaban contando cómo llegaron a la situación en la que están. Son historias increíbles porque a pesar de que son difíciles, ellos siguen ahí, luchando por sus derechos y, por supuesto, con ganas de vivir. Para mí son un ejemplo de resiliencia» cuenta Jesús. Este voluntario de Santiago reconoce además que «por mucho que quieras mantenerte alejado de los prejuicios, éstos te acaban atrapando de una manera u otra, y la única forma de deshacerte de ellos es conociendo la realidad».
 
 
Los voluntarios de Lugo y Vigo coinciden en que el trato y el cariño que reciben de los usuarios es una de las mayores gratificaciones de su labor en FEAFES Galicia. «El sentimiento de gratitud es recíproco, yo también aprendo día a día gracias a ellos. Todos aportan un granito de vida para el desarrollo personal de los demás» dice Iván. Santiago, por su parte, tiene claro cuál es el momento más reconfortante: «Creo que lo mejor de todo es cuando vamos a jugar contra otras asociaciones y al final todo el mundo se saluda cariñosamente, independiente del resultado».
Desde FEAFES Galicia no tenemos más que palabras de agradecimiento para todas las personas que dedican parte de su tiempo libre a hacer que la vida de las personas con problemas de salud mental sea un poquito mejor: ¡GRACIAS!