Durante su estancia, las personas con enfermedad mental que acudan al viaje realizarán numerosas actividades acompañados de los monitores. Participan las asociaciones Andaina, Albores, A Creba, Morea, Alba y A Mariña. Con este tipo de actividades, los participantes rompen con la rutina diaria, se enriquecen culturalmente, socializan y se integran en la sociedad. A su vez, permite un respiro a los familiares en su tarea de cuidadores.