Una de cada dos mujeres sufre violencia por el hecho de ser mujeres. Si además tienen un problema de salud mental, el riesgo de ser víctimas de violencia se multiplica.
«No podemos mirar hacia otro lado. Ellas nos necesitan» fue la premisa con la que en el 2018 Saúde Mental A Mariña puso en marcha su proyecto de vivienda tutelada para mujeres con problemas de salud mental que son víctimas de violencia de género.
Esta iniciativa, pionera en España, busca ofrecer un entorno seguro y atender las necesidades de estas mujeres, que hasta ese momento no contaban con ningún recurso específico para ellas. La atención se extiende a los ámbitos laboral, sanitario, social, judicial… A todos los aspectos necesarios para que puedan tener una vida lejos de la violencia de género.
«Ofrecemos una atención especializada y la llevamos a todas las áreas específicas que necesita cada caso», explica María José Nóvoa, directora de Saúde Mental A Mariña. Añade que esa atención sólo es posible gracias al trabajo de un equipo interdisciplinar que está disponible las 24h, los 365 días del año.
Vanesa García, es parte de ese equipo. Fue la primera coordinadora que tuvo la vivienda en sus inicios. Asegura que las necesidades de estas mujeres van más allá de la atención psicológica: «Cuando llegan presentan grandes carencias y muchas no se ven. Como en la autoestima, en creer en sus capacidades. Hay que atender un poquito todo».
Tras una primera valoración de acogida, elaboran un proyecto individual de intervención adecuado a cada caso. Porque a la vivienda tutelada llegan perfiles muy diversos: «Tenemos mujeres con estudios superiores, mujeres con dificultad en la lectoescritura; mujeres con apoyo familiar, mujeres sin apoyos; mujeres que tienen hijos, mujeres que no los tienen», nos cuenta Diana Durán, la actual coordinadora de la vivienda tutelada.
Desde que arrancó la iniciativa, la vivienda acogió a 17 mujeres y dos menores. En el 2022, llevan atendidas a 5 mujeres y una bebé, que llegó al recurso con siete meses y cumplió el año de vida allí. Y es que en este proyecto se acoge a las mujeres que lo necesitan y también a sus hijas e hijos, o incluso a ascendentes con algún tipo de dificultad, si fuese el caso.
María José Nóvoa, agradece a la Consellería de Fomento do Emprego e Igualdade, tanto a la Conselleira María Jesús Somoza, como a la Conselleira de Igualdade, Susana López Abella; el apoyo recibido para llevar a cabo este proyecto que cubre una necesidad que hasta el momento estaba desatendida.
Este 25 de noviembre, es necesario reivindicar también los derechos y las necesidades específicas de las mujeres víctimas de violencia de género que tienen además algún problema de salud mental.
Frente a las violencias, no podemos mirar hacia otro lado. Ellas nos necesitan.
