La Federación de Asociaciones de Familiares y Personas con Enfermedad Mental de Galicia (Feafes) conmemora un año más el Día Mundial de la Salud Mental, que este año lleva por lema Alternativas frente a la crisis. El valor de nuestros derechos. Con esta frase, desde el movimiento asociativo queremos expresar que no estamos dispuestos a renunciar al derecho a recibir una asistencia adecuada, tanto social como sanitaria, pese a la difícil situación económica actual.
Para Feafes Galicia, existen alternativas para mantener esta atención de calidad a través de la detección precoz, la continuidad en los tratamientos y el apoyo a la autonomía, que como inversión, reducen a medio plazo costes para las Administraciones Públicas. En otras palabras, Feafes Galicia advierte que recortar en programas de acompañamiento e integración, provoca no sólo un grave problema para millares de personas sino también un aumento en el gasto farmacéutico y los ingresos hospitalarios. Hay que tener en cuenta que en Galicia hay más de 41.000 personas con certificado de discapacidad por enfermedad mental.
Ante esta situación económica, es fundamental mantener los apoyos a todas las personas con discapacidad y sus familias, en particular aquellas con un trastorno mental. Es necesario recordar que los recursos de atención en salud mental ya eran claramente insuficiente antes de la crisis. Feafes Galicia muestra su rechazo a limitar las prestaciones previstas en la Ley de Autonomía Personal y Atención a las Personas en Situación de Dependencia (conocida como Ley de la Dependencia), así como aumentar el precio de cualquier servicio o tratamiento que requieran las personas con trastorno mental.
Además, la grave crisis económica está provocando un gran número de situaciones estresantes como desahucios, desempleo prolongado, o exclusión social, que perjudica la salud mental general de la población y favorece la aparición de trastornos, como como la ansiedad y la depresión. De hecho, los profesionales de la salud mental advierten de qué aumentaron las consultas en Atención Primaria relacionadas con estas dolencias.
Como ciudadanos de pleno derecho, las personas con trastorno mental no pueden ser discriminadas en ningún ámbito de su vida, el empleo, la participación, el ocio o el acceso a cualquier tipo de servicio. El valor de nuestros derechos es incalculable, porque esos derechos son los que permiten a miles de personas recuperarse tras la aparición de un trastorno mental y retomar una vida activa y satisfactoria.
Cifras
Una de cada cuatro personas padece alguna enfermedad mental a la anchura de su vida. El principal problema en salud mental es el gran número de personas que no cuentan con un tratamiento adecuado: en muchas ocasiones no se mantiene una perspectiva integral del tratamiento, ni se asegura que sea continuado. Según una encuesta de la OMS, entre un 35 y un 50% de las personas con enfermedad mental de los países desarrollados no recibe ningún tipo de tratamiento.
En épocas de crisis económica corremos el riesgo de situar la salud mental en segundo plano dentro de nuestras prioridades. Con todo, desde Feafes Galicia consideramos necesario prestar atención a los diferentes problemas de salud mental, ya que entre el 2.5 y el 3% de la población adulta tiene una enfermedad mental crónica y una de cada cuatro personas tendrá algún tipo de enfermedad mental (crónica o leve) a lo largo de su vida.
Así pues, Feafes Galicia reclama que a ningún ciudadano se le niegue el derecho a recibir atención médica o que esta se limite sólo a las urgencias. Esto sólo provocaría el deterioro del trastorno de estas personas y, en muchos casos, una condena a la exclusión. De este modo, reiteramos nuestro objetivo de hacer cumplir la Convención ONU de los Derechos de las Personas con Discapacidad ratificada por España.
Por otro lado, segundo un informe elaborado por la Universidad Complutense de Madrid, sólo el 4.6% de las personas con trastorno mental tiene un empleo regular. Un 44% de las personas con trastorno mental asegura haber sufrido algún tipo de discriminación laboral.